En Europa, verano para muchos es sinónimo de viajes, campamentos y excursiones. Es el periodo vacacional más largo del año, en el que el curso escolar se interrumpe y la actividad de muchas instituciones y empresas también disminuye.

Nunca había sido tan fácil visitar tantos lugares en tan poco tiempo

En estos meses, cada vez es más frecuente que los adolescentes aprovechen para explorar el mundo, viajando solos o en compañía de sus amigos, por lo general también de su misma edad. Nunca había sido tan fácil visitar tantos lugares en tan poco tiempo y a un precio asumible.

Sin embargo, hay aspectos a considerar a la hora de viajar solos siendo menores de edad, ya que no dejamos de estar todavía bajo la custodia de nuestros padres, madres o tutores legales, que a su vez son responsables de todo lo que nos ocurra dentro y fuera del territorio nacional. La maleta del menor viajero se compone de permisos, seguros, kits de salud y de seguridad digital, además de una pila de recomendaciones a tener en cuenta antes de embarcarse en la aventura.

La documentación y los permisos de salida es tal vez lo más obvio en que se centraría toda familia, pero antes de llegar a este paso existen unos cuantos más que se deben dar para asegurarnos de que el o la adolescente tendrán un viaje seguro y exento de complicaciones.

Los destinos pueden ser seductores y atrayentes en las fotos, pero no tienen por qué corresponderse con la realidad

Dicen que el mundo es demasiado bonito como para viajar solo por Internet, pero en este caso sí que es necesario hacer parte del viaje previsto por Internet. Los destinos pueden ser seductores y atrayentes en las fotos, sin embargo hay que revisar antes en Google Street View o cualquier otra herramienta similar los aledaños del lugar en el que nos instalaremos, para comprobar si realmente se trata de una zona segura, iluminada y que cuenta con servicios básicos cerca.

No vayas sin plan, no es divertido

Improvisar a veces puede resultar divertido cuando se trata de una excursión, pero en un viaje al extranjero se requiere un planning de viaje detallado, pues se trata de la estancia en un país que no es el nuestro y que está fuera de nuestra zona de confort, del cual desconocemos prácticamente todo y en el que vagaremos sin rumbo si no hemos planificado con anterioridad lo que queremos hacer. Del mismo modo, tener un plan te permite aprovechar mejor el tiempo, y si las actividades se concentran en una franja horaria razonable también hace que el desplazamiento sea seguro.

La información es poder, y en un viaje internacional más que nunca. Es importante aprovechar el potencial de Internet para informarnos de las características del país al que vamos, saber horarios (si es costumbre hacer vida nocturna o no), conocer costumbres principales y normas implícitas de socialización para evitar situaciones incómodas, e investigar sobre las creencias culturales de la región para no ofender a nadie sin querer.

Estar de viaje no nos hace inmunes ni nos exime de riesgos

Nuestra seguridad debe ser nuestra principal preocupación a la hora de planificar el viaje. El azar puede ser caprichoso y estar de viaje no nos hace inmunes ni nos exime de riesgos, por lo que se debe extremar la seguridad. Para ello es recomendable siempre ir con un seguro de viajes y de salud, ambos muy necesarios para que no haya complicaciones si nos sucede algo o a nuestro equipaje. Del mismo modo, hoy en día la seguridad digital también es fundamental; conectarse a las redes Wifi públicas es muy arriesgado y poco recomendable, así que lo mejor es o bien contar con un plan de datos que nos permita conectarnos desde el extranjero (que suele ser muy caro), o bien conectarse siempre utilizando una VPN (red privada virtual) que proteja nuestra conexión cifrando nuestro tráfico en Internet y ocultando la dirección IP, lo que salvaguarda nuestra identidad digital de posibles ataques de ciberdelincuentes.

La noche puede llegar a ser peligrosa en ciertas ciudades, ya que la protección policial no es igual en todos los países, así que, aunque suene a consejo típico, mejor alejarse de los peligros de la noche; para ello nuestra primera recomendación es llegar siempre de día al destino, ya que siempre habrá más gente y más luz que hará que nos sintamos más cómodos, puesto que si pasa cualquier cosa (aunque no tiene por qué) o si necesitamos algo, es de día y será fácil obtenerlo. No hace falta recordar que no todas las actividades de ocio se pueden hacer cuando viajamos solos o solas, tenemos que ser conscientes de que somos quienes velamos por nuestra integridad física, por lo que se recomienda estar siempre alerta en fiestas, cenas en zonas desconocidas para nosotros y eventos en los que haya mucha concurrencia de gente. No olvidemos ser precavidos también en la vestimenta, sobre todo en el caso de chicas menores lo mejor es no ir ataviadas con accesorios llamativos de gran valor como joyas de oro.

Revisa la normativa de tu aerolínea

Una vez planificada nuestra aventura internacional, no hay que olvidarse de la documentación que comentábamos al principio de este artículo. Si bien cada aerolínea tiene normas específicas al respecto, en general las personas menores de edad residentes en España deberán llevar su DNI en vigor para viajar fuera del territorio nacional y dentro de la Unión Europea, el Espacio Económico Europeo y la Confederación Helvética, y su pasaporte en vigor si viajan fuera de estos territorios. Además, también será necesario que lleven firmada por el padre, la madre o el tutor legal una declaración de permiso de viaje fuera del territorio nacional.

Siempre hay que consultar la normativa de la aerolínea a este respecto, y en caso de querer viajar a territorios como China o Corea del Norte también será necesario tramitar un visado, para lo cual se debe contactar con la embajada del lugar de destino para obtener más detalles. Además, si la familia lo considera oportuno, se puede buscar una aerolínea que ponga a disposición del pasajero menor de edad un acompañante durante el vuelo.

Finalmente, antes de embarcar queda un último paso: compartir con la familia todo el itinerario (números de vuelo, contacto y dirección del alojamiento, y programa de actividades), ya que si sucede algo esta información les puede ayudar a localizarnos rápido. Y no hay que olvidarse de establecer un sistema de comunicación fiable con la familia, que permita estar en contacto constante.

«Los viajes son en la juventud una parte de la educación y, en la vejez, una parte de la experiencia»

Y ahora sí, ¡a volar! Feliz viaje. Que la edad no te prive de esta experiencia de aprendizaje y crecimiento, pues como decía Francis Bacon, «los viajes son en la juventud una parte de la educación y, en la vejez, una parte de la experiencia».

Fuentes:

https://administracion.gob.es/pag_Home/Tu-espacio-europeo/derechos-obligaciones/ciudadanos/viajes/documentos/menores-solos.html

https://visaindex.com/es/requisitos-visado/pasaporte-espana-lista-paises-sin-visado/