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Navidades al aire libre

Una forma de disfrutar del invierno

Las Navidades para algunos o el solsticio de invierno para otros es una etapa con un ambiente festivo cargado de alegría. Las vacaciones de esta época del año son algo especial, puesto que no solo son para descansar y desconectar como solemos hacer en verano, sino más bien para reunirse con la familia y los amigos, estrechar lazos y retomar antiguas relaciones, son un momento de renovación personal. Por eso, hoy os traemos una serie de actividades que podéis realizar en familia durante estos 15 días de vacaciones, y serán actividades al aire libre, porque del frío también se puede disfrutar.

  • Esquí o patinaje sobre hielo: la nieve es sin duda uno de los clásicos del invierno, y el símbolo representativo de esta estación del año. Pasar un par de días esquiando en cualquiera de las estaciones de esquí como La Molina, Baqueira Beret o Vall de Núria, es un magnífico plan para compartir con la familia un fin de semana. No obstante, si quieres disfrutar de la nieve pero prefieres no irte tan lejos, la mejor opción es optar por el patinaje sobre hielo. Solo en Barcelona hay más de cuatro pistas, de entre las cuales destacan la del FC Barcelona y la de Illa diagonal. Podrás sentirte como en el Rockefeller Center, cuya pista conocemos prácticamente de memoria por las numerosas veces que ha aparecido en las películas navideñas.
  • Visitar un bosque: las mejores épocas para visitar un bosque son la primavera y el otoño. Este momento es seguramente el más indicado para conocer la flora y la fauna locales, además de recoger setas y buscar piedras preciosas. La curiosidad de los niños es infinita, por eso esta actividad puede ser una muy buena opción a tener en cuenta a la hora de organizar las salidas a realizar en familia durante estas vacaciones. En Cataluña, uno de los parajes más impresionantes es la Fageda de la Grevolosa por la antigüedad de su flora y la variedad de su fauna. Asimismo, el parque natural del Montseny es una perfecta opción para esta época, puesto que en otoño la variedad de su flora lo convierte en un espectáculo visual sublime.
  • Escalar una montaña: las últimas semanas de diciembre se caracterizan por las miles de fiestas a las que nos invitan y por disfrutar paladeando los platos y dulces típicos de esta época, por eso hacer senderismo escalando una montaña es una magnífica forma de equilibrar la balanza; y si además lo hacemos acompañados de nuestros amigos o familiares será una experiencia gratificante, ya que es también una forma de romper con la rutina y conectar con la naturaleza. En Barcelona y en sus alrededores hay miles de montañas que esperan ser escaladas, solo tienes que encontrarlas: Una buena opción al respecto es la famosa montaña de Montserrat. También, a una hora de Barcelona en coche, encontramos el parque natural de Sant Llorenç del Munt, localizado en el municipio de Matadepera, allí se halla la Mola (la montaña más alta de este parque con 1.103 m de altitud). En su cima se erige el monasterio románico de Sant Llorenç (actualmente reconvertido en restaurante/museo).

Además de estas actividades, que bien podrían servir para mantenernos ocupados durante todas las vacaciones, también podemos optar por otras más relajadas y que no requieren de mucha planificación, como montar en bicicleta, recorrer los mercadillos navideños y purísimas que se organizan, o dedicar una tarde al cine y otra a una maratón de cuentos con los niños.

 

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